[] Su caída de agua de veintidós metros de altura impresiona. Construida para conmemorar el centenario de la muerte del arquitecto
Juan de Villanueva, esta fuente ornamental fue inaugurada en la
Glorieta de San Vicente en 1952. Pero, en mayo de 1995, se trasladó al
Parque del Oeste. Desde entonces, preside imponente la entrada al
Paseo de Camoens. Aunque, en su reubicación, perdió las tres esculturas que se situaban en su pilón:
El Madrid artesano,
El Madrid de San Isidro y
El Madrid capital. Ahora, algunas de estas estatuas se han recuperado y pueden encontrarse en los jardines del
Parque de la Dalieda de San Francisco o de
El Buen Retiro.
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